La Escuela de Administración Municipal (EAM) es pionera en la extensión de derechos y construcción de ciudadanía. Por primera vez, 72 trabajadorxs municipales participan del “Curso introductorio de lengua de señas argentina” que se dicta en la sede de la ASOEM.

La propuesta surgió a raíz de una demanda concreta de lxs inspectorxs multifunción que fue canalizada a través de sus delegadxs sindicales. Dada la inquietud de otrxs pares, se extendieron cupos para que 72 trabajadorxs (inspectorxs multifunción, relaciones públicas y ceremonial, GSI y guardia central) pudieran efectuar la capacitación.

El curso sienta un precedente muy importante en la formación de lxs trabajadorxs municipales ya que, el próximo año, el módulo “Lengua de Señas” estará incluida en la estructura curricular de la EAM como instancia de cursado obligatorio para todos los agrupamientos y tramos.

Desde el área de Formación Profesional de la ASOEM, sostienen que la acción sindical inicia un trabajo en relación a la mirada con perspectiva en discapacidad y que el objetivo es imprimir esa perspectiva en las construcciones de las propuestas académicas de la EAM.

Mayor accesibilidad

Lxs trabajadorxs se dividieron en dos comisiones que se dictan los martes y jueves, por el lapso de tres meses. Cabe destacar que, la capacitación se encuentra a cargo de Cecilia Berón, Román Sotello y Sebastián Bruno; profesores de Lengua de Señas Argentina formadxs y recibidxs en la Universidad Nacional de Entre Ríos.

“El objetivo del curso es que las inspectoras e inspectores de tránsito puedan adquirir conocimiento de la Lengua de Señas Argentina, estrategias y herramientas comunicativas que le permitan lograr niveles de comunicación efectivos en la interacción con personas sordas dentro de su contexto laboral como social”, explicó Sebastián. Por su parte, Román señaló que la capacitación “es muy importante para derribar barreras y lograr mayor accesibilidad para todas las personas sordas en la ciudad de Santa Fe”; mientras que Cecilia aseguró: “queremos que esta ciudad sea muy eficiente en lo que se refiere a accesibilidad”.

En relación a la experiencia de trabajo con lxs inspectorxs, Cecilia comentó: “me entusiasma mucho la posibilidad de participar en la enseñanza a estos grupos, a quiénes noto muy interesados”. Y Sebastián añadió que “los resultados de las clases son muy buenos, lo cual alimenta las ganas y energías de quiénes tenemos la labor de enseñar”.

Otro de los aspectos destacados por Román es “el interés para aprender a comunicarse en una diversidad de contextos, como por ejemplo: familia, amigos y compañeros de trabajo. Además, considero muy importante que puedan acceder al conocimiento de la comunidad sorda y lograr vínculos a través de la comunicación entre personas sordas y oyentes. En mi interacción con los y las estudiantes veo cómo la comunicación entre las partes es posible de formas muy eficientes y positivas”.

Finalmente, el docente Bruno precisó que lxs trabajadorxs municipales no sólo tienen “conocimiento y contacto con la lengua de señas sino también con su cultura e historia; construyendo así una mirada social donde se reconozca a las personas sordas como sujetos de derechos muy distantes de un paradigma netamente médico de la ‘discapacidad’ que agudiza las diferencias entre unos y otros”.