Por Juan R. Medina, secretario General de la ASOEM -Santa Fe-.
Desde la ASOEM, estamos viviendo una etapa de afianzamiento de un nuevo modelo sindical que tiene diferentes vertientes y que concibe la política sindical -con todos los elementos que la atraviesan- como el nodo más importante de la organización que nuclea a trabajadores y trabajadoras municipales y comunales.
Tras la declaración de la pandemia de Covid-19, reforzamos las acciones del Comité Paritario de Salud y Seguridad en el Trabajo con el objeto de garantizar las condiciones sanitarias y laborales de los agentes estatales. A partir del 2 de septiembre de 2021, inauguramos un proceso postpandémico con una Asamblea Extraordinaria que -aunque convulsionada- fue apoteótica para la historia de la institución gremial porque tiene que ver con el afianzamiento de la autonomía del sindicato.
Desde nuestra concepción de la política sindical, octubre es un mes sumamente importante para la consolidación de la democracia sindical. El 12 de octubre tuvimos una Asamblea Ordinaria que aprobó Memorias y Balances de los años 2019 y 2020, con más de 600 personas en el recinto. Ese mismo día, se desarrolló una Asamblea Extraordinaria donde se puso a consideración de las y los afiliados la construcción de un poder temporal dentro del sindicato: la Junta Electoral que va a tener a su cargo el proceso eleccionario que proclamará la Comisión Directiva y la Comisión Revisora de Cuentas para el período 2022-2026.
En definitiva, fueron dos actos de notable trascendencia institucional porque pudimos poner en juego los elementos de la democracia sindical. Las y los compañeros expresaron posiciones que representan a diferentes sectores sindicales en un contexto -según mi criterio- acorde a una asamblea; es decir, un clima tenso porque se debaten las ideas de las y los trabajadores municipales y comunales. Incluso sucedió algo que hacía mucho tiempo no se daba: hubo varias mociones sobre los vocales. Por supuesto que se procedió a la correspondiente votación y salió adjudicada la moción que tuvo mayor cantidad de votos. Para nosotros es muy gratificante poder realizar este tipo de acciones que tienen que ver con lo que siempre proclamamos: el debate de ideas entre las trabajadoras y los trabajadores afiliados al sindicato.
El tiempo va a pasar y vamos a seguir haciendo asambleas. En particular, estas tres asambleas fueron relevantes porque había que retornar a la vida sindical después de tantos meses sin actividades colectivas en forma presencial.
El mes de octubre también incluyó la elección de delegados y delegadas para el período 2021-2023. El proceso electoral marcó que el 80% renovará su mandato mientras que el 20% son compañeras y compañeros electos por primera vez. En este punto, creo necesario recordar que el Cuerpo de Delegados, por definición estatutaria, es un colectivo netamente deliberativo pero nosotros, en esta nueva lógica sindical, le dimos mayor importancia. La política de la ASOEM concibe al Cuerpo de Delegados como un órgano no sólo declarativo sino también decisorio. Y esto es así porque las y los delegados son las personas que, en el modelo representativo, tienen en su voz y en sus manos el pensamiento de cada área municipal y comunal. En la gestión sindical de la ASOEM, el Cuerpo de Delegados es uno de los órganos decisivos; al igual que la Comisión Directiva. En lugar de ejercer una cuestión imperativa, ambos debaten y definen las mejores acciones para las y los trabajadores. Esta nueva forma de hacer política sindical, por un lado, rompe esa idea anacrónica de consultar todo con las bases y, por otro lado, nos acerca a las bases ya que, al ser elegidos por sus compañeros y compañeras, son los propios delegados y delegadas quiénes llevan su impronta en cada acción sindical.
Finalmente, el próximo 21 de diciembre serán las elecciones para determinar a la nueva Comisión Directiva y Comisión Revisora de Cuentas de la ASOEM. Como actual gestión sindical, estamos muy cerca de concluir el mandato que comenzó en 2017 y se estiró hasta 2022, un año más debido a la pandemia de Covid-19. Tenemos una enorme satisfacción porque desde la ASOEM -Santa Fe- colaboramos con un granito de arena para generar un nuevo sindicalismo con mayor participación de las bases, un nuevo sindicalismo que concibe a las y los trabajadores de manera integral y un nuevo sindicalismo que ofrece innumerables herramientas para que las y los compañeros puedan manifestarse desde la política, la cultura, la educación, la formación y la recreación.
Sin soberbia ni jactancia, creemos que la ASOEM es un faro en la sociedad santafesina. Eso tiene que ver con entender que a las instituciones las generamos las personas y que no sólo tenemos el compromiso de velar por los objetivos que le dieron origen -hace ya 75 años- sino que también tenemos el enorme desafío de construir una sociedad más igualitaria en beneficio de todas las personas que habitan un mismo territorio.